Ábrete paso con tu coche entre hordas de zombies y militares armados hasta los dientes y con con órdenes de aniquilarte (maldita sea, ¿por qué no se los comen los zombies?), esquivando como puedas infinidad de obstáculos (tales como coches en llamas, coches sin llamas, coches grandes abandonados, coches pequeños abandonados, etc...) con cuidado de no atropellar a personas inocentes () que corren entre zombies sin ningún tipo de protección (y, no obstante, siguen vivas) en una autopista con una inquietantemente extensa (casi infinita) línea recta.
¡A viciarse!
No hay comentarios:
Publicar un comentario